domingo, 28 de febrero de 2010

CUEVA MUSEO LA INMACULADA de PURULLENA (GRANADA)

RINCONES MÁGICOS: CUEVA MUSEO LA INMACULADA (PURULLENA-GRANADA)













domingo, 14 de febrero de 2010

SORT, ¡RIEN NE VA PLUS!

SORT, ¡RIEN NE VA PLUS!

Sorteo no es el nombre religioso de una mujer que ha dejado de ser novicia para convertirse en monja, es la operación con la que los juegos de azar reparten suerte y dinero, ruinas y desdichas. Hay sorteos más famosos y populares que otros. Por encima de todos ellos está el de la lotería de Navidad, el 22 de diciembre. Con él sueñan las familias españolas para tapar agujeros y deudas que hacen la vida más ingrata y menesterosa.
El canto pitagórico del coro de San Ildefonso se espera con oídos avaros. Incluso hay quienes en la víspera encienden velas y ponen perejil a San Pancracio. Si después de todos los rituales habidos y por haber coincide que el número agraciado por el azar es el nuestro, las voces de los niños y niñas del colegio de San Ildefonso se transforman ipso facto en un canto de ángeles. Entonces la letanía de números suena como el Aleluya de Haendel.
Para los que tienen más fe que el Alcoyano, hay otro sorteo de lotería con un poquitín menos de glamour y expectación que el de Navidad, es el sorteo del Niño. Si después de todo sigues confiando en la suerte, el día 6 de enero puedes seguir tentando el destino o la bondad de los Reyes Magos. ¿Quién sabe? ¿Y si eres tú? Lo que sí está claro es que nos rascará aún más el bolsillo y terminará de zamparse los reintegros del día 22.
El juego es el juego. Más que ganar gusta el riesgo. Costes y premios hay que repartirlos a escote. La empresa nunca pierde. Desde que nacemos estamos concebidos para jugar. Nos pasamos media vida jugando. Todo lo que tocamos lo convertimos en juego. Como diría Calderón, la vida es juego y los juegos sueños son.
Cualquiera, a poco que se le pregunte dice que, lo más importante es la salud. Pero muchas personas esperan a decirlo después del sorteo, después de mirar el listado de números premiados. Loterías, cupones, quinielas, cartas, tragaperras, bingos, casinos... Con tal de hacernos millonarios hipotecamos sueldo, vacaciones y el capricho que nunca nos damos. Sin meter los gastos de tabaco y cervecitas que es otro buen pellizco a final de mes. Con razón decía mi madre que la mejor lotería es el ahorro y la economía, o también una buena alcancía.
Hay quienes utilizan la estadística para acertar combinaciones o para saltar la banca en los casinos. Excepto la trampa todo está permitido, incluso acudir a futurólogos o consultar con la almohada. Con tal de acertar y ganar, algunos han hablado hasta con sus antepasados. Los caminos de la suerte son inescrutables. El juego y su fiebre de oro nos enseñan más a perder que a ganar. Algo bueno tenía que tener.
Las emociones y la correspondiente dosis de adrenalina que nuestro acontecer cotidiano del día a día no nos ofrece, intentamos encontrarlas a través de nuestras aficiones y ocio. Así, bien nos refugiamos en nuestro equipo de fútbol cuyos triunfos sentimos como propios, no sin antes haber jugado a la porra; por aquello de darle un poquito de más emoción a la cosa. Bien pasamos las horas frente a una máquina tragaperras hipnotizados por su luz y sonido, como si aquellas luces estridentes fueran una puesta de sol hermosa. Bien tiramos la casa por la ventana en juegos de azar y apuestas de todo tipo... El caso es conseguir y consumir la dosis exacta de adrenalina que nuestra sed de aventura necesita diariamente. El caso es sentirnos por un momento protagonistas del éxito y la victoria. Y si todavía no te has cabreado con tu suerte, y la ruina no ha visitado todavía tu casa, puedes jugarte el café a los chinos o el cubata a los dardos.
Si lo importante es la salud no convirtamos el juego en una enfermedad. Los extremos nunca son buenos. Pero... ¿Y si toca? Bueno jugaremos un poco por si las moscas, vayamos a tonterías. Sin pasarse. Que la suerte nos acompañe y la salud nunca falte. Y... ¡Hagan juego, señores...! ¡Rien ne va plus!


Autor Custodio Tejada


miércoles, 10 de febrero de 2010

PENSAMIENTOS Y FRASES CÉLEBRES 2

PENSAMIENTOS Y FRASES CÉLEBRES 2


Somos todos tan limitados que creemos siempre tener razón.

Johann W. Goethe, escritor alemán.


Todo el mundo encuentra bello lo que es suyo.

Cicerón, filósofo romano.


La fuerza bruta aún puede tolerarse, pero la razón bruta en modo alguno.

Oscar Wilde, escritor británico.


La suerte ayuda a los que se atreven, el perezoso se estorba él mismo.

Séneca, filósofo romano.


Con la concordia crecen las cosas pequeñas; con la discordia se hunden las mayores.

Salustio, historiador romano.


El perdón nos hace superiores a los que nos injurian.

Napoleón I.


Ser bueno es fácil; lo que es difícil es ser justo.

Víctor Hugo, escritor francés


No hay nadie que sea feliz gratuitamente.

Plauto, escritor romano.

viernes, 5 de febrero de 2010

IF (SI) de RUDYARD KIPLING










SI…
Si puedes mantener la cabeza sobre los hombros
cuando otros la pierden y te cargan su culpa,
Si confías en ti mismo aún cuando todos de ti dudan,
pero aún así tomas en cuenta sus dudas;
Si puedes esperar sin que te canse la espera,
o soportar calumnias sin pagar con la misma moneda,
o ser odiado sin dar cabida al odio,
y ni ensalzas tu juicio ni ostentas tu bondad:

Si puedes soñar y no hacer de tus sueños tu guía;
Si puedes pensar sin hacer de tus pensamientos tu meta;
Si Triunfo y Derrota se cruzan en tu camino
y tratas de igual manera a ambos impostores,
Si puedes tolerar que los bribones,
tergiversen la verdad que has expresado
y que sea trampa de necios en boca de malvados,
o ver en ruinas la obra de tu vida,
y agacharte a forjarla con útiles mellados:

Si puedes hacer un montón con todas tus victorias
Si puedes arrojarlas al capricho del azar,
y perder, y remontarte de nuevo a tus comienzos
sin que salga de tus labios una queja;
Si logras que tus nervios y el corazón sean tu fiel compañero
y resistir aunque tus fuerzas se vean menguadas
con la única ayuda de la voluntad que dice: “¡Adelante!”

Si ante la multitud das a la virtud abrigo,
Si aún marchando con reyes guardas tu sencillez,
Si no pueden herirte ni amigos ni enemigos,
Si todos te reclaman y ninguno te precisa;
Si puedes rellenar un implacable minuto
con sesenta segundos de combate bravío,
tuya es la Tierra y sus codiciados frutos,
Y, lo que es más...¡serás un Hombre, hijo mío!

RUDYARD KIPLING

IF

If you can keep your head when all about you
Are losing theirs and blaming it on you,
If you can trust yourself when all men doubt you
But make allowance for their doubting too,
If you can wait and not be tired by waiting,
Or being lied about, don’t deal in lies,
Or being hated, don’t give way to hating,
And yet don’t look too good, nor talk too wise:

If you can dream–and not make dreams your master,
If you can think–and not make thoughts your aim;
If you can meet with Triumph and Disaster
And treat those two impostors just the same;
If you can bear to hear the truth you’ve spoken
Twisted by knaves to make a trap for fools,
Or watch the things you gave your life to, broken,
And stoop and build ‘em up with worn-out tools:

If you can make one heap of all your winnings
And risk it all on one turn of pitch-and-toss,
And lose, and start again at your beginnings
And never breath a word about your loss;
If you can force your heart and nerve and sinew
To serve your turn long after they are gone,
And so hold on when there is nothing in you
Except the Will which says to them: “Hold on!”

If you can talk with crowds and keep your virtue,
Or walk with kings–nor lose the common touch,
If neither foes nor loving friends can hurt you;
If all men count with you, but none too much,
If you can fill the unforgiving minute
With sixty seconds’ worth of distance run,
Yours is the Earth and everything that’s in it,
And–which is more–you’ll be a Man, my son!

RUDYARD KIPLING