MIXTURA (Antología poética) de Marina Tapia.
Opiniones de un lector. Por Custodio Tejada.
MIXTURA
(Antología poética) de Marina Tapia, poeta chilenoespañola, que nació en
Valparaíso y vive en Granada. Aliar Ediciones, colección Averso. Diez libros
más Exentos en diez años (2013-2024) que muestran toda una trayectoria poética,
pero también existencial. 154 poemas y 250 páginas, más un gran prólogo que
abre y desgrana las páginas en llamas de esta antología, firmado por el poeta
Juan José Castro Martín, y después una
“Nota inicial” de la misma autora que sirve de aviso y brújula para lectores
navegantes. La ilustración de la portada es una pintura de la propia autora: un
jarrón con un pájaro posado encima y que mira hacia atrás. La edición de Averso
como siempre tan exquisita. Una poeta con una voz de tornaviaje, de ida y
vuelta, de nexo entre dos orillas, de la otredad y el yo.
Escribe Gilbert Durand que las imágenes no valen tanto por las raíces que ocultan, sino por las
flores poéticas y míticas que revelan. Y eso es lo que muestra toda antología:
una revelación. Para la poeta Dionisia García: “La poesía, cuando es verdadera,
es arte sin paliativos.” “La poesía es muy caprichosa, es el género por excelencia. Te exige ir por la vida con
los ojos muy abiertos, estar en medio de
todo.” “Porque el poeta, si es poeta de verdad, no sabe lo que hace. Son los
otros, los lectores, quienes pueden dar su opinión sobre lo leído.” (Entrevista
realizada por Natalia Carbajosa, Jot Down). Y así es cómo la escritura, y
especialmente la poesía seduce y embriaga, trayendo a nosotros la fragancia de
esa consciencia universal que nos habita y que está en todas partes y también
afuera, el poeta es solo un vehículo para manifestar su presencia.
Sobre Mixtura, de la poeta chilenoespañola Marina Tapia,
escribe Jimy Ruíz Vega en su blog El Fescambre, en una reseña titulada
"Digerir el mundo”: “Mixtura es una antología que pone al lector frente a
una exposición de poemas en el que el yo lírico se deja ver en el tiempo, desde
su estado de entusiasmo e inspiración, hasta de éxtasis y fervor por la
naturaleza. (…) En Marina, la poesía está totalmente despojada de retórica, y
la metáfora nunca impide ver la vida, antes bien, se pone a su disposición. Y
Ángel Olgoso dice en la reseña “Mixtura de fuego”, en Moon Magazine (8-10-2025)
que esta antología reúne sus diez “poemarios fundentes, hermosos, coherentes,
insoslayables.” “Marina ha transmutado alquímicamente su vida, sus estados
emocionales y los armónicos acordes de su voz poética en una decena exacta de
volúmenes, de los cuales se recoge felizmente una amplia selección en esta
mixtura”. “Un libro panorámico”, “un florilegio hermoso”, “una poeta verdadera
e imprescindible”. ”En su poesía, todo está vivo y fresco, primoroso en sus
proporciones y cadencia, pequeño y encantador pero sólido y profundo en vez de
impresionante”. Y para Santos Domínguez Ramos la “Imaginación y sensibilidad se
conjugan en la voz de Marina Tapia y en su mirada plástica hacia el misterio
del mundo para desarrollar una concepción de la poesía como búsqueda.”
Publicar una antología es una forma de hacer balance de
una trayectoria y también la experiencia de haber conseguido una meta.
Podríamos asegurar que un autor es el resultado de todo el imaginario que surge
de su iconografía léxica. Y así Mixtura es un retablo lingüístico: 50 mujeres
desnudas, El relámpago en la habitación, Marjales de interior, Jardín
imposible, El deleite, Bosque y silencio, Un kilim de palabras, Islario,
Corteza, Piedra que mengua y Exentos. Y con estas ventanas de su estancia la
autora se entrega al lector, a través de esta precisa y panorámica mirada que
nos habita en el itinerario simbólico. Y es precisamente esa semántica de
imágenes las que nos da el ser y el sentir de la poética de Marina, de su
epifanía cosmológica y existencial. Mixtura invita al misterio y a la
curiosidad, a la intuición y a la sensorialidad, a asomarse a la consciencia.
Vamos de la reivindicación femenina a la percepción más telúrica, de una
simbiosis entre la naturaleza y la poeta, de la tierra y la poesía, de la
ecología y el ser, del tiempo y del espacio. “Madre piedra que estás en la
tierra,/ santificada sea tu extirpe./ Vuelva a nosotros tu reino./ Hágase tu
voluntad,/” (Piedra que mengua, p. 237). O su poema Imagen: “Despojarme del
peso de mi imagen,/ vivir sin piel,/ a nada estar sujeta,/ vestirme o
desvestirme de mí misma.” (Corteza, p 212). Es la poética de Marina una poética
de ida y vuelta, una voz de tornaviaje y encuentro. “Estoy aquí, Granada, ante
tus cielos amplios, ansiosa,/ seca,/ náufraga./ He llegado/ con mi atril-ataúd”
(Islario, p. 195).
Y ahora os
enunciaré y haré referencias a dedicatorias, citas, lugares, nombres y versos
de su antología que alumbran y perfuman su poética y esta reseña, a modo de
geocaches lectores. Las dedicatorias trazan una ruta directa al corazón de la
autora: a su abuela María, a su madre, a su padre, a su hija Camila, a su
hermana Gloria, a Ángel, a su amiga Margarita Osborn, a sus amigas del Laurel
de la Azotea, a Sophia Halkidou, a Ana Mañeru Méndez, a Elena, paco y Eugenia,
a Pamela, Daniel y Sofía, a José Manuel Darro, a Josefina Martos Peregrín, a
Elena Martín Vivaldi, a Anna Ajmátova, a Emilia Pardo Bazán…
Las
citas que pueblan el libro también nos plantean un itinerario intertextual y
lector a seguir, una herencia que también está repartida en dos hemisferios:
Rubén Darío, Gabriela Mistral, Federico García Lorca, Antonio Carvajal, Jorge
Teillier, Pablo de Rokha, Juana Castro, Gonzalo Rojo, Andrés González Andino,
Eduardo Lizalde, Francisco Umbral, Clara Janés, Yayo Herrero, Rosalía de
Castro, Rafael Guillén, Violeta Parra, Ángeles Mora, Raine María Rilke, Ángel
Valente, Mariluz Escribano Pueo, Antonio Machado, Octavio Paz, Úrsula Kle Guin…
Y
os
dejo aquí también una letanía casi hímnica de palabras y nombres, como vasos
comunicantes que resuenan como gongs y que guían el viaje semántico y simbólico
del libro, por la pintura, la poesía, el pensamiento, la mitología…: Goliat,
Lilith, Pollock, Picasso, Yves Klein, Noé, Platón, Georgia O,Keeffe, Annie
Dillard, Chagall, Penélope, Lord Byron, Mary Shelley, Rousseau, Emily
Dickinson, Artemisa… Y también nos hace viajar por territorios y nombres que
como mapas guardan tesoros y memoria: Granada (España), Valparaíso (Chile),
Troya, Zujaira, Carmen de los Mártires, Machu Pichu, la Alhambra, Guadix,
jardines de Daraixa, Fuente Vaqueros, Almuñécar, Jericó, Asgard, Valhalla,
jardín de las Hespérides, Cartago, Iznajar, Rapa Nui, Mediterráneo, Vancouver
Island, Baeza, Antequera, Petra…, pero también por la zarza ardiente y la
fotosíntesis, la Madre Piedra y la lava, el canto y el grito, el beso y el
semen.
Y ahora, como un
derviche lector que gira de página en página y de libro en libro, os voy a
llevar a un conjunto de versos que actúan como portales interdimensionales a su
antología, esa casa hecha de vida y de palabras a la que nos invita Marina.
“Probadme, mordisquead mis pensamientos” (Derechos y deberes de la autora, p.
39, del libro 50 mujeres desnudas); “Para la migración/ yo fui educada,”
(N.I.E. p. 41, 50 mujeres desnudas); “Exiliarse fue un acto rotundo” (Razón de
la gaviota, p. 42, 50 mujeres desnudas); “Llegas a mi sediento y luminoso,/
nadie te ve en mi cuarto,/ nadie ha visto/ esa vida de luz/ de tu esperma,” (El
relámpago en la habitación, p. 56, del libro del mismo título); “Ven, pueblo,
congregación de voces y paisaje” (Ruta de las Fortalezas, p. 81, del libro
Marjales de interior); “Allá en Valparaíso/ se eleva un volantín de aire”
(Septiembre, p. 92, Marjales de interior); “Oculta en una cueva de Guadix/
maduro el silencio/ mis palabras” (Casa cueva, p. 91, Marjales de interior);
“Estoy aquí, Granada, ante tus cielos amplios,/ ansiosa,/ seca,/ náufraga/
(Razón del desembargo, p. 195, del libro Islario); “Mis ojos se recrean en los
charcos/ lo mismo que en los cielos.” (Oración de la orquídea, p. 125, del
libro Jardín imposible); “Acércate al reinado del oído” (El oído, p 138, del
libro El deleite); “La luz será una colcha que te guarde” (La vista, p.139. El
deleite); “Soy la miga de pan que retiene tu mano,” (El tacto, p.140. El
deleite); “He sido, soy, seré poeta… Poeta precedida de otros vuelos”
(Vocación, p.163, del libro Bosque y silencio); “Mi espíritu de hoja/ zigzaguea
en el aire,/ buscando su sentido/” (Y pese a todo, canto, p. 177, del libro Un
kilim de palabras); “A mí solo me bastan los senderos que van hacia las olas/…/
los símbolos de un viaje hacia mí misma.” (Afirmación, p. 188, del libro
Islario); “Valparaíso,/ encima de esta grieta te recreo/” (Boceto sin modelo,
p.199, Islario); “Renace de un recuerdo/ guardado en mis esquinas.” (Voces,
p.205, del libro Corteza) “Mi familia es un bloque/ de cajones pequeños/ que no
pueden tocarse.” (La colmena dispersa, p. 210, Corteza); “Hoy voy a hablar de
límites,/ del peso del pasado,/ de conquistas.” (Celebración, p.218, Corteza);
“Antes de que tu aliento me llevara, / nosotras, las errantes/ (Guardianas de
las tumbas)” 16, p.235, del libro La piedra que mengua); “Madre Piedra que
estás en la Tierra,/ santificada sea tu estirpe. Vuelva a nosotros tu reino.”
(22, p. 237, La piedra que mengua); “Soy de ella, de él/ de vosotros,/ de esa
turbia moheda/ de culpas.” (Terceto de la luz negra, p. 246, Exentos.)
Y
para finalizar esta opinión lectora dejadme que os invite a leer a esta poeta
verdadera rebosante de conocimiento y de consciencia. Una antología, Mixtura,
que es un florilegio de vida y emociones, de poesía “elegante, sensorial y
rítmica”. Un viaje por el lenguaje de una voz poética llena de música y símbolos,
de espacio íntimo y otredad. Mixtura representa una transubstanciación de la
vida y el alma de Marina Tapia que se hace lenguaje mistérico para regalarse a
nosotros sus lectores.
OPINIONES
DE UN LECTOR
Custodio
Tejada
Noviembre
de 2025
TODOLITERATURA.
https://www.todoliteratura.es/noticia/61960/poesia/mixtura-antologia-poetica-de-marina-tapia.html

